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domingo, 1 de enero de 2017

Cada 2 de enero, es un día negro para el mundo del ciclismo.

Varias muertes y una retirada dolorosa, hacen que cada 2 de enero, el mundo ciclista se ponga triste.
Vamos por partes:
Miguel Induráin anuncia su retirada.
El día 2 de enero de 1997, el considerado por muchos como mejor deportista español de la historia, anunciaba su retirada como ciclista profesional.
Un cúmulo de circunstancias deportivas y personales llevaron a Indurain a tomar una de las decisiones más duras de su vida.
En un comunicado de 38 líneas escritas a máquina, el pentacampeón del Tour de Francia informaba de la decisión adoptada a los medios de comunicación.
A continuación, figura el texto íntegro del comunicado leído por Miguel Indurain en la multitudinaria conferencia de prensa que dio en el Hotel Ciudad de Pamplona:
“Hoy, 2 de enero de 1997, quiero anunciar públicamente mi retirada del ciclismo profesional.
Ésta ha sido una decisión larga y profundamente meditada. Como bien es sabido, he necesitado tres meses para poder tomarla.
Se ha hablado y se ha especulado mucho sobre el tema. Lo cierto es que me ha resultado tremendamente difícil decidirme puesto que físicamente estoy bien y pienso que todavía podría estar en condiciones de lograr el tan deseado sexto Tour.
Por otra parte, ya en los primeros meses de esta temporada empezó a rondarme la idea de que con el 96 había llegado la hora de dejarlo y dedicarme a otras facetas de mi vida; de hecho, así lo tenía planeado. Intenté ganar el Tour con todas mis fuerzas y no lo conseguí, pero gané la medalla de oro en Atlanta, lo que me parecía el broche ideal para mi carrera deportiva. Corrí la Vuelta a España y, muy a pesar mío, tuve que abandonar debido a una infección viral. Este hecho cambió mi visión de las cosas. No podía despedirme con un abandono.
En mi entorno me animaban a seguir, tenía que ganar el sexto Tour de Francia.
Así las cosas, cada día que pasaba me resultaba más difícil ver con claridad cuál era el mejor camino a seguir.
Llevo doce años en el ciclismo profesional, he corrido vueltas grandes, pequeñas, campeonatos nacionales, del mundo y hasta unas Olimpiadas. En estos años he tenido grandes satisfacciones por los triunfos logrados, pero también me ha costado mucho esfuerzo y sacrificio el obtenerlos. Estar al máximo nivel exige mucho de uno mismo y cada año que pasa resulta más difícil conseguirlo.
Creo que ya le he dedicado el tiempo suficiente al ciclismo de competición y ahora deseo disfrutar de este deporte como afición.
En definitiva, y tras meditarlo minuciosamente, pienso que he tomado la mejor decisión para mí y para mi familia. Ellos también me están esperando.
Finalmente, quiero aprovechar la ocasión para expresar mi más sincero agradecimiento a todos los medios de comunicación que con tanto interés habéis seguido toda mi carrera deportiva, a Banesto por su apoyo y, muy especialmente, a toda la afición que sigue este deporte con tanto entusiasmo.
Gracias por todo y hasta pronto”.
Fausto Coppi y su extraña muerte.
Un 2 de enero de 1960 falleció Fausto Coppi. Murió envenenado y no por malaria, según el testimonio de un dirigente deportivo italiano, que lo supo de un monje destinado en Burkina Faso.
El diario "Corriere dello sport" publicó una entrevista con Mino Caudullo, integrante del Comité Olímpico Nacional Italiano, que en 1985 viajó a Burkina Faso por cuenta del COI para promocionar la actividad deportiva.
En ese viaje, Caudullo contactó con un monje, conocido como "padre René", que entonces contaba unos ochenta años, y que le contó que Coppi no murió por malaria sino como consecuencia de una mezcla de hierbas que le prepararon los nativos.
En diciembre de 1959, Coppi fue invitado a la entonces Alto Volta (ahora Burkina Faso) para participar en un safari y correr un criterium, en un viaje en el que también estuvieron otros corredores, como los franceses Jacques Anquetil y Raphael Geminiani. Tras unas jornadas de estancia en ese país, Coppi regresó a Italia y unos días después empezó a sentirse mal, con síntomas de fiebre, por lo que los médicos le diagnosticaron una gripe que después se supo que era malaria, de la que falleció el 2 de enero de 1960 en el hospital de Tortona (noroeste).
La muerte de Coppi causó una fuerte conmoción en Italia y dio paso a una fuerte polémica nacional por el erróneo tratamiento médico. Según el testimonio del padre René a Mino Caudello, Coppi fue envenenado por nativos como venganza por el hecho de que un corredor africano había muerto años antes tras una caída durante una carrera ciclista.
Coppi no tenía nada que ver con aquel incidente, pero era el corredor más famoso en Alto Volta y simbolizaba el deporte poderoso y rico, según Caudello, que se ha decidido a hablar ahora, casi diecisiete años después de haber recibido el testimonio. El detonante para decidirse a hablar es que recientemente leyó un artículo sobre Coppi en el que hablaban de su misteriosa muerte y de la existencia de unas extrañas hierbas que Coppi y Geminiani chuparon para para atenuar la sed durante una batida de caza en Alto Volta.
El diario reconoce que la historia suscita muchas dudas y que su propia investigación para confirmar todos los datos no ha dado resultado, debido a los más de cuarenta años transcurridos desde la muerte del "campeonísimo", como era conocido Coppi, una leyenda para los italianos.
Jean de Gribaldy fallece un 2 de enero de 1987.
Fue ciclista profesional de 1945 a 1954, período durante el cual logró apenas cuatro victorias, y cuyo mayor éxito fue quedar 2º en el Campeonato de Francia en ruta. Entre sus resultados más destacados, está el ser 9º en la Paris - Niza 1946 y 10º en la Lieja - Bastoña - Lieja 1952. Comenzó su carrera como director deportivo a mediados de los años 1960. Quizás uno de los mejores directores deportivos de la historia del ciclismo.
Apodado "el Vizconde", es famoso para haber descubierto campeones como el irlandés Sean Kelly, el portugués Joaquim Agostinho, el neerlandés Steven Rooks, o el también francés Eric Caritoux. Además de descubridor de talentos, este director deportivo atípico supo también volver a dar una oportunidad a numerosos corredores olvidados por otros equipos.
Personaje fuera de la norma, piloto de avión en su tiempo libre, desde 1994 una de las calles de Besançon lleva su nombre: "la Subida Jean de Gribaldy", que les conduce a la cumbre de la colina de Chaudanne. Dirigía en Besançon, en el Lugar del Mercado más exactamente, un almacén que permanece inscrito en la historia de esta ciudad. Gracias él, se celebraron allí en 1980 los Campeonatos del mundo de ciclismo sobre pista.
Falleció en 1987, a los 68 años de edad, en un accidente de tráfico.
Anualmente, se celebra en julio la carrera ciclista "Montée Jean de Gribaldy" en Besançon.
Todos coinciden en una cosa. Era tacaño, creaba los equipos con pocos presupuesto, pero sus plantillas eran largas, dio la oportunidad a muchísimos y amaba el ciclismo.
Encima, nos dejó esta frase:
“El ciclismo, es como el boxeo. No es un juego. Es un deporte duro, terrible, implacable, que exige muy grandes sacrificios. Se juega a fútbol, a tenis, a hockey, pero no se juega a ciclismo”. 
Emile Masson fallece un 2 de enero de 2011.
Fue un ciclista belga.
Los triunfos más notables en su palmarés fueron en 1938 en la Flecha Valona y una etapa en el Tour de Francia, y en 1939 en la París - Roubaix.
Por esto, cada 2 de enero, el mundo del ciclismo se pone triste...
Manuel Pérez Aguirre.

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