Sport velocipédico en 1893.
En el segundo semestre de 1893, Carlos Vieyra de Abreu escribe para la revista madrileña Actualidades un artículo dedicado a dos de los deportes predominantes en España en aquél entonces, las carreras de caballos y el velocipedismo.
En cuanto al deporte de las dos ruedas, haciendo una reseña de la historia del vehículo, nos comenta que la primera máquina velocipédica, si máquina puede llamarse al primitivo vehículo, fue debida a un tal Richard en 1600, de profesión médico en la Rochelle (Francia).
La persona que retoma el interés por el aparato es el Barón Drais von Sauerbronn (1785-1851), que en 1816, consigue perfeccionar la máquina.
El Barón Drais
En 1834, el español José Ricart, construye en Barcelona un velómano. Según José Godina Castell-síí lo construyó en 1828 y consistía en presionar unas palancas con las manos, siendo así capaz de desplazarse.
En 1855, el francés Pierre Michaux (1813-1883) incorpora los pedales al eje de la bicicleta, dotando de un sinfín de posibilidades al aparato. Según otros autores fue en 1860.
En 1879 comenzó la fabricación, con fines comerciales, de los primeros triciclos y bicicletas.
Los primeros triciclos parece que no tuvieron mucha aceptación en España, no así las bicicletas que causaron furor.
El deporte velocipédico adquirió tal relevancia que comenzaron a crearse sociedades y a organizarse carreras. De julio a diciembre de 1893 se disputaron carreras en Almería, Andújar, Águilas, Ávila, Barcelona, Bilbao, Cádiz, Gijón, Morón de la Frontera, Manacor, Mataró, Palencia, Reus, Santander, San Sebastián, Sevilla, Segovia, San Fernando, Toledo, Valencia, Vitoria, Valladolid y Zaragoza.
El 26 de julio de 1893 se inauguró un velódromo en Mataró y otro en Barcelona el 24 de septiembre. En la actualidad (sic) (1894), en Jerez de la Frontera (Cádiz) y en el barrio madrileño denominado Madrid Moderno, se espera que para la primavera sean inaugurados sendos velódromos.
Velódromo de Mataró
Como hechos deportivos más importantes, el año ha deparado los triunfos de Luis del Campo, el récord de Enrique Marco y la visita de los ciclistas franceses Perrodil y Farman.
Campo ha vencido en 87 pruebas de las que disputó, finalizando segundo en 9 ocasiones, 4 en tercer lugar y 3 en cuarta posición. En 1893 ganó 6 campeonatos y al finalizar el año ha agregado los Campeonatos de Valencia y Barcelona.
La carrera París-Madrid fue motivo de la llegada a nuestro país de los corredores franceses Perrodil y Farman. La carrera comenzó en la Embajada española en París el 25 de junio a las 6 de la mañana y, tras breves descansos en el camino, llegaron al salón del Heraldo de Madrid en la tarde del 2 de julio de 1893, tras recorrer 1313 kilómetros.
En el mes de julio Enrique Marco consiguió el récord de España de las 24 horas. Realizó 375 kilómetros.
Referencias:
“Sport”; Actualidades (Madrid), revista del 2º semestre de 1893, páginas 53 a 58. Autor: Carlos Vieyra de Abreu.
“El velocípedo: sus aplicaciones higiénicas y terapéuticas”. Autor: José Codina Castellví. Madrid, 1893.
http://www.museodeldeporte.net/fichas1/siglo-xix/personajes/jose-godina-castell-sii-.htmlFoto del Velódromo de Mataró: https://www.enciclopedia.cat/materia/esports?title=&page=1496
Libro ¡Bici! ¡Toro!. Un poeta en bicicleta. (París-Madrid, un viaje épico - festivo en 1893). De Édouard de Perrodil.
Por Luis Javier Bravo Mayor
Por Luis Javier Bravo Mayor
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